25 días después del día que se ganó un país. 22 días después del día que se paró un país porque nos lo robaban. 26 de Octubre. Reuniones en Palau. Urkullu mediando. Amenazas y promesas de armisticio. La espada de Damocles del 155 encima. Iceta mediando. El peso del cielo sobre Atlas humanos encima. Llamadas. Reuniones en sedes de partidos. Rumores de autonómicas. El President frente a las amenazas de más sangre de unos y a las promesas de dialogo de otros, plantea elecciones. El recuerdo de los sacos de dormir en colegios, de las porras en la calle, de los butrones en cristales y de los cuerpos de un pueblo que fue eterno en un día que durará años. Casado recordando el destino de Companys, Cospedal y su ejército en portadas, planes de asalto al Parlament, mercenarios con altavoz dispuestos a blanquear la barbarie. Dilema de lloros por inmediatas decepciones o por futuros sufrimientos. Dilema de más calle o más despacho. Presiones, mensajes. PPSOEC´S ofreciendo ´155 monedas de plata´ a quien las quisiera aceptar (sí, el famoso tuit hablaba de la oferta de PPSOEC´S y PNV, no del President. Sabe mal por las conspiranoias). El señuelo es autonómicas como dique a un 155 que laminaría una República nonata. ERC y CUP publican comunicados en contra. La responsabilidad recae en la espalda de un ex alcalde de Girona independentista desde que tiene uso de razón. Haga lo que haga, toda la información sólo la tiene él, haga lo que haga, muchos seremos injustos con él. Convocatoria de rueda de prensa del President. PSOE y PNV prometen parar el 155 a cambio de elecciones. En 10´ Albiol y Casado juran frente a 30 micros que nada ni nadie parará el pleno del Senado del golpe de estado a Catalunya llamado 155. PSOE y PNV ya no cogen el teléfono. Silencio. Contundencia inmediata y lapidaria del PP. Todo era mentira. De las promesas de más sangre y dialogo, sólo queda la sangre. Querían un 155 desde el Senado y unas Autonómicas desde el Palau. Querían una rendición de tocomocho que poder vender en sus medios. Querían unos juicios de Salem en directo. 24h después un grupo de políticos históricos con una mayoría parlamentaria, política y social inédita detrás cumplirán con un programa electoral, con un clamor y con la historia. Macià, Carrasco i Formiguera, Labordeta, Sampedro y tantos otros sonreirán desde el cielo de los valientes, 100 cerberos salivarán desde las puertas del averno de 5 teles.
Golpe de estado desde el atril del Senado blanqueado en 1000 horas de radio. Fiscales reprobados y juezas amigas de Ministras. Amenazas. Rajoy y su 21 de diciembre. La mitad del gobierno más valiente de la historia de Catalunya en la cárcel de Estremera y la otra mitad en la cárcel del exilio de Bruselas. Ganar unas elecciones ilegítimas, sin líderes, sin medios, sin ánimos. Y volver a ganar. La calle nos salva. Otra vez. 70 diputados frente a 57. Los 4 del PP al Grupo Mixto. Negociaciones de JxC, ERC y CUP. Saturno devorando a sus hijos. Una nueva victoria transversal con dificultades pasadas. 2.063.361 votos republicanos, 96.853 más que en 2015, 43.217 más que el 1O. Una vez más, historia hecha cotidianidad. Muy bien. ¿Y ahora qué? Qué hacer frente a un estado que no parará. Qué hacer frente una comunidad internacional sordomuda. Qué hacer frente a dos realidades distintas. Una en la que encarcelar a la disidencia política es escandaloso y otra en la que eso da votos. Una en la que robar sale más barato que votar. Una en la que el odio es un rap en youtube y no Urdangarin en Suiza. Una en la que los 15.000 de Tabarnia tienen 15.000 primes times y 2.063.361 de republicanos ni los buenos días. El diagnóstico es sencillo: respetar a quién protegió con sus cuerpos este país, respetar la República ganada el 1O, proclamada el 27O y defendida el 21D, restitución del status quo previo al golpe de estado del 155, restitución del Govern legítimo de Catalunya, restitución del President legítimo de Catalunya y restitución de las 40 leyes sociales contra la pobreza habitacional, energética e infantil aprobadas por el Parlament catalán y tumbadas por un TC español indigno. El método es complejo: siendo más. Más. Somos 2.063.361. Somos muchos pero no somos todos. Se trata de hacer aquello que llevamos haciendo 5 años. Interpelar, convencer. Crecer. El crecimiento republicano, la consolidación de la República no pasa por el Frente Nacional naranja y su alma mater azul. El crecimiento republicano, la consolidación de la República pasa por el socialismo catalanista que quede. Interpelar al progresismo republicano socialista que aún vota un recuerdo. Interpelar a quien aún recuerda la tumba de su abuelo en una cuneta, el primer carnet socialista de su padre o la octavilla con la cara de Felipe que guardaban en su casa. Sí hay un socialismo catalanista que interpelar y quien no lo vea, no ve nada. Sí hay una dicotomía que plantearles: la República diversa de los 2.063.361 o la Monarquía naranja de besamanos de las teles. Yo me niego a abandonar y entregar a C´s a quien aún mira las manifestaciones y presos políticos desde el sofá de su casa con el corazón tricolor. Yo me niego a abandonar y entregar a C´s a quien gritó Sí se puede con camisetas verdes en plazas. Yo me niego a abandonar y entregar a C´s a quien vota a PSC y aún recuerda con tristeza los sueños de Maragall. Yo me niego a abandonar y entregar a C´s a quien milita en el PSC y se le revuelve el estómago con según que selfies. Yo me niego a abandonar y entregar a C´s a cualquier progresista que quiera regalarle a sus hijos una realidad mejor tengan la bandera que tenga en el corazón. Y quien no lo vea, no ve nada.
Y disculpen la osadía pero es que yo vengo de Santa Coloma y Súmate y creo en imposibles que ya he visto.
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