Josep Borrell es el ministro más indigno de la democracia española y los ha habido muy indignos.

Mas indigno que Barrionuevo y Fernández Díaz, más indigno que Trillo y que Corcuera, porque Josep Borrell no es un ministro, es un hooligan, es un militante de la plataforma ultraderechista Sociedad Civil Catalana, que blanquean los medios de comunicación españoles pero que tan bien conocemos aquí en Catalunya.

Josep Borrell, que en los noventa fue la esperanza para mucha gente, la esperanza del PSOE, es hoy una caricatura de sí mismo. Desde aquí pedimos su dimisión, por hooligan, por mofarse en un mitin del PSC de Oriol Junqueras mientras pasaba las navidades sin sus hijos en una celda de estremera, por señalar a mi compañero Jordi Salvador, por estafar sentado en un sillón de Abengoa y por reirse de un genocidio. Y es que a los mentirosos inhumanos ningún perdón, ningún olvido, lo único que tenemos que decirle és: Josep, vuelve a la cueva de dónde saliste.

P.D: Sabemos que plantar cara a quienes nos llaman golpistas tendria, tiene y tendrá consecuencias políticas, mediáticas y personales, pero por respeto a qué y a quienes representamos no dejaremos de hacerlo. Así que lacayos y voceros id preparando más artículos a sueldo porque esto va para rato.